Uno de los principales factores que nos impiden comer sano es la falta de tiempo. Las obligaciones del día a día a veces son tan extenuantes que, cuando llegamos a casa, lo que menos nos apetece es ponernos a cocinar, por lo que optamos por comida rápida, platos preparados muy poco nutritivos o, directamente, nos saltamos comidas.
Para ayudarte a llevar una alimentación más sana sin obligarte a pasar horas que no tienes en la cocina, aquí te dejamos seis consejos para comer bien cuando no tenemos tiempo para ello.
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6 consejos para comer sano cuando no tienes tiempo
Tomar un desayuno saludable
Si tenemos poco tiempo a lo largo del día para cocinar y comer de forma saludable, saltarnos la primera comida del día no es una buena opción. Por lo tanto, desayunar bien es una manera de asegurarnos una primera comida sana para lo que nos deparará el resto del día.
La mejor opción de desayuno, por su aporte de nutrientes y la sencillez en su elaboración, es optar por mezclar frutas con yogur, algo de canela y frutos secos. Si no tenemos tiempo ni siquiera para tomar el desayuno en casa, podemos preparar una macedonia casera y llevarla al trabajo.
Comprar alimentos rápidos de preparar
Una forma de asegurarnos de comer sano incluso cuando no tenemos tiempo o no nos gusta cocinar es abastecer la despensa con alimentos que requieren poco tiempo de preparación y, a la vez, son saludables como el tofu, las legumbres cocidas, conservas de sardinas, el pavo cocido o quesos con poca grasa, entre otros.
Uno de los mejores alimentos en este aspecto es el huevo: es sano, es saciante y se puede consumir de diferentes maneras, incluso hervido. También verduras que no requieran de cocción ni pelado como las endivias, la zanahoria, la col, los tomates, o berros, entre otros.
Otra opción es comprar nuestro pack de frutas y verduras troceadas: deliciosas combinaciones de frutas y verduras frescas de excelente calidad cortadas en porciones para que tú sólo tengas que disfrutarlas. Una opción sana y apetecible a cualquier hora del día y en cualquier fecha del año.
Fijar un horario para las comidas
A veces, nuestra carga de trabajo es tal que la comida pasa de ser una prioridad a ser una mera opción, por lo que posponemos el momento y terminamos almorzando cualquier cosa a las cinco de la tarde o picoteando de todo un poco a lo largo del día. Algo que no es muy saludable para nuestro cuerpo.
Para evitar esto, lo mejor es fijar un horario de comidas y seguirlo a rajatabla. La mejor forma de comer bien si se está muy atareado es contemplar la hora de la comida en nuestra agenda, como una tarea más. Y, por supuesto, no saltarnos esta tarea.
Tomar un almuerzo ligero y luego, una buena merienda
Si nuestra jornada nos impide tener un horario amplio para comer, lo mejor es optar por comidas ligeras y rápidas de comer para que la digestión sea agradable. Estas comidas ligeras ayudarán a calmar el apetito. Pasadas unas horas, podemos tomar una merienda o un tentempié para saciar nuestro estómago.
Si tenemos poco tiempo y debemos comer fuera o incluso delante de un ordenador, lo mejor es probar un solo plato al día y apostar por ensaladas, zumos y bocadillos caseros. Y, por supuesto, después tocará merendar fruta o frutos secos para picar sin perjudicar nuestra salud.
Reservar un momento para cocinar para toda la semana
Otro truco para comer bien cuando no tenemos tiempo, aunque es algo más tedioso, es planificar un menú semanal y preparar previamente las comidas para luego congelarlas e irlas sacando según el momento.
Si no tenemos tiempo para cocinar durante la semana y queremos evitar consumir platos precocinados, lo recomendable es buscar un momento concreto en el que estemos más desocupados para preparar los platos de la semana. Podemos llevarlos a la oficina, para comer mejor o por las noches para evitar invertir nuestro tiempo de descanso en cocinar.
Cocinar platos sencillos
Si nuestro ritmo de vida no nos deja tiempo para cocinar o no queremos invertir el tiempo libre en la cocina, podemos optar por recetas sencillas pero igualmente saludables y con ingredientes fáciles de encontrar.
Pescado al horno, filetes a la plancha, pastas, sofrito, verduras o arroces son ideas de cocina saludable que no llevan mucho tiempo, perfectas para preparar una comida o una cena rápida. Y si queremos comer algo más elaborado, podemos hacerlo en esos días en los que nos quedemos en casa y podamos pasar algo más de tiempo en la cocina.